28 ENE 2018, 12:00 AM
|
ELI HEILIGER
Opinión
Marcha Verde libra hoy otra batalla cívica contra la corrupción
SANTO DOMINGO. La Marcha Verde continúa hoy con su reclamo de cero impunidad, con una concentración aledaña al Palacio Nacional, en la continuación de una serie de movilizaciones masivas y cívicas que ha venido realizando en el último año en diferentes partes del país y el exterior.
Este movimiento cívico, cuya primera manifestación se llevó a cabo el 22 de enero del 2017, ha aglutinado a gran parte del país bajo la consigna de castigo para los responsables del robo de los recursos del Estado. La encuesta Mark Penn del 30 de septiembre del 2017 dice que un 66% de los encuestados simpatiza con este, lo que habla muy bien de su aceptación.
Marcha Verde surgió a la escena pública cuando en el país se revelaron las noticias del pago de 92 millones de dólares en soborno a funcionarios y políticos por parte de la empresa brasileña Odebrecht para obtener la concesión de obras públicas que luego sobrevaluó, lo que es considerado como uno de los casos de corrupción de mayor calado en el país, del cual la Procuraduría General de la República excluyó del expediente acusatorio a figuras relevantes del Partido de la Liberación Dominicana.
Marcha Verde debe mantenerse como un espacio de lucha contra la corrupción, que es uno de los principales males que afectan al país
En diciembre del 2017, Marcha Verde solicitó un juicio político para el presidente Danilo Medina por supuestamente recibir financiamiento ilegal en la pasada campaña electoral, comenzó a convocarse a través de las redes sociales hasta convertirse en un fenómeno social que ha movilizado también a miles de dominicanos en Estados Unidos, España, Canadá y otras naciones.
Su crecimiento y valoración en el seno de la población se ha producido pese a la agresiva campaña en su contra de parte de las llamadas “bocinas”, e incluso pretendieron asociarla con el narcotráfico, tal como ocurrió con el apresamiento de Juan Comprés, dirigente del Movimiento Los Peregrinos de Moca, al cual un agente de la Dirección Nacional de Control de Drogas colocó cocaína en su vehículo, pero no advirtió que fue grabado lo cual sirvió para desmontar la patraña.
Comentarios